La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha descrito la conducta del grupo parlamentario del PP durante la sesión de control al Gobierno en el Senado como “una vergüenza”, después de sufrir un lapsus que provocó un comentario hacia los ‘populares’ indicando que “queda Gobierno de corrupción para rato”.
En una entrevista en ‘La hora de la 1’ de TVE, que fue recogida por Europa Press, Díaz explicó el desliz sucedido, denunciando “un deterioro manifiesto” en el clima del Senado, que incluso obligó al presidente de la cámara, el ‘popular’ Pedro Rollán, a reprender a los senadores de su partido.
“Claro que tengo preocupación. La frivolidad de todos. Ustedes vieron la sesión de control. Si permiten decirles, es que es una vergüenza”, declaró enfáticamente, recordando momentos específicos del debate, como cuando Alicia García, portavoz del PP en el Senado, sugirió que Pedro Sánchez se beneficiaba de “negocios húmedos”.
“O sea, una señora que habla de feminismo hablando de la esposa del presidente. Es una vergüenza”, agregó Díaz sobre la acusación de García de “mirar para otro lado” ante las noticias sobre presuntos negocios de saunas gays que habrían sido gestionados por el suegro de Sánchez, padre de Begoña Gómez.
EL PP NO QUIERE ACABAR CON LA CORRUPCIÓN
Díaz criticó al PP por tratar el tema de la corrupción “de manera frívola” con el fin de atacar al Gobierno, pero luego no respaldar la propuesta de Sumar para establecer una agencia pública anticorrupción, “un organismo independiente” que ayudaría a prevenir irregularidades.
“El Partido Popular votó en contra. Es decir, el PP no quiere que se acabe con la corrupción en España. Y esto me inquieta muchísimo. Me inquieta muchísimo”, continuó la vicepresidenta, señalando el hastío de la ciudadanía española ante la corrupción y la falta de ética en la política.
Recordó que el partido de Alberto Núñez Feijóo ha sido la única organización política condenada “a título lucrativo por corrupción”, manifestando que al PP “le importa un rábano” la corrupción porque se opone a la creación de mecanismos de control que impidan sus continuas malas prácticas.
Finalmente, censuró al PP por considerar que la agencia anticorrupción “es una ideaca” de Sumar o del Gobierno, cuando en realidad es una exigencia de organismos internacionales como el Grupo de Estados contra la Corrupción (GRECO) del Consejo de Europa o Transparencia Internacional.













