Quince meses después de empezar la legislatura, la Comisión de Hacienda vota esta semana su primera iniciativa legislativa. Se trata de un proyecto de ley para incorporar un impuesto complementario que garantice una tributación mínima a multinacionales y grandes corporaciones.
El proyecto no genera apenas controversias, pero sí sus enmiendas: Hacienda busca incluir en ella un paquete de medidas fiscales que acompañe a sus futuros Presupuestos. No es una reforma pero en juego está, por ejemplo, el futuro de los gravámenes a banca y energéticas.
El PSOE registró la conversión en impuesto del primero, pero renuncia a la continuidad del segundo tras un acuerdo con Junts. Alega falta de apoyos para impulsarlo, pero socios como ERC y Bildu amenazan con tumbar todo el proyecto si no incluye el impuesto energético, que impulsan en sus enmiendas.
¿Qué dicen los portavoces de los grupos que decidirán el futuro del paquete fiscal? Demócrata envió un cuestionario a todos los grupos representados en la Comisión. Estas son sus respuestas:
PSOE: Justicia fiscal y aritmética parlamentaria
JUAN ANTONIO GONZÁLEZ GRACIA (PSOE)
¿Qué espera del paquete fiscal que va a tramitarse en el Congreso? ¿Cuáles son las prioridades y exigencias de su grupo para apoyarlo?
El proyecto de ley es una trasposición de una Directiva europea que garantiza una tributación mínima a nivel global para las grandes empresas, lo que refuerza la justicia de nuestro sistema tributario, haciéndolo más eficiente y redistributivo. Se trata de avanzar hacia un orden fiscal internacional más justo, armonizado, y basado en la idea de que quien más gana, más debe contribuir al conjunto de la sociedad.
¿Deben continuar los gravámenes a banca y energéticas?
Para introducir cualquier tipo de medida es necesario llegar a acuerdos con los grupos parlamentarios y tenemos que contar con la aritmética parlamentaria. La voluntad del Grupo Socialista de mejorar nuestro sistema tributario y alcanzar consensos es clara. Nuestras enmiendas contemplan, por ejemplo, convertir en un impuesto con vocación de permanencia el gravamen extraordinario sobre el sector bancario. Como se ha demostrado durante su vigencia, las entidades financieras tienen capacidad para incrementar su aportación a los ingresos públicos sin que ello perjudique su competitividad.
¿Existe margen para bajar impuestos? ¿Dónde deben concentrarse las rebajas fiscales, si es que deben hacerse? ¿Es necesario hacer ajustes en el IVA? ¿Qué consumos deberían ver subida o bajada su fiscalidad? (preguntas agrupadas en un sólo bloque por voluntad del Grupo Socialista)
Tras la tragedia de la DANA en Valencia y otras partes de España, se hace más evidente que nunca la importancia de tener un sector público fuerte. Frente a quienes apuestan por desmantelar los servicios públicos, defendemos un Estado de bienestar fuerte, universal y de calidad que proteja al conjunto de la población. Y para ello es necesaria una fiscalidad justa. La mejor solidaridad es la que sale de nuestros impuestos.
España ha sido señalada en los últimos años por el escaso peso de la llamada 'fiscalidad verde'. ¿Qué medidas deberían aprobarse en este sentido, si es que deben hacerse?
Incluir los objetivos climáticos en el centro de las políticas económicas y fiscales es algo ineludible. Es necesario insistir en la fiscalidad verde, concienciar de que el que contamina paga y que con esos recursos podemos luchar contra el cambio climático e incentivar la transición ecológica. En este proyecto de ley, en concreto, proponemos, en línea con las recomendaciones de la Comisión Europea, equiparar la tributación del diésel a la gasolina, sin que afecte al gasóleo profesional. Es una medida de carácter medioambiental para luchar contra el cambio climático.
Sumar: «El fin del impuesto energético sería un mazazo»
CARLOS MARTÍN URRIZA (SUMAR)
¿Qué espera del paquete fiscal que va a tramitarse en el Congreso? ¿Cuáles son las prioridades y exigencias de su grupo para apoyarlo?
Esperamos que amplíen en una dimensión apreciable los ingresos públicos. La economía y la Hacienda española afrontan retos y obligaciones impuestas por Europa en términos de consolidación que exigen más ingresos. Tenemos que seguir mejorando nuestro Estado del Bienestar, con la construcción del pilar de la Dependencia, y desarrollar inversiones para las transiciones energética y digital. Hay margen para recaudar más, estamos 80.000 millones de euros por debajo de la media europea, y hay que buscar mayorías para transitarlo.
Una reforma fiscal ha de procurar también un reparto más equitativo y justo de las cargas, con una mayor tributación de las rentas del capital en el IRPF. Queremos también un nuevo impuesto sobre grandes herencias, basado en el modelo tan exitoso del Impuesto sobre Grandes Fortunas, y ampliar el alcance de este a partir de patrimonios de un millón de euros y no tres como está ahora. También queremos actuar sobre el mercado de vivienda, elevando la presión fiscal a pisos turísticos y alquiler de temporada para reducir la rentabilidad de cualquier otro uso que no sea el alquiler de vivienda habitual. Y eliminar el régimen fiscal bonificado de las socimi.
¿Deben continuar los gravámenes a banca y energéticas?
Si desaparece el energético sería un mazazo. En un momento, además, donde vemos las terribles consecuencias del cambio climático, salvar a las empresas energéticas del sostenimiento de lo común, cuando son las grandes contaminadoras y responsables, es una profunda contradicción. Y más cuando ahora necesitamos recursos para asistir a empresas y ciudadanos de la Comunidad Valenciana para su reconstrucción. Va a haber más golpes como este, necesitamos que todo el mundo arrime el hombro. Es terrible, máxime cuando estas empresas no aportan prácticamente nada a través del Impuesto sobre Sociedades, un 3% máximo, gracias a procesos de ingeniería fiscal, e incluso compra de empresas con muchas pérdidas acumuladas, que luego se descuentan con créditos fiscales para pagar menos. Al final, se escaquean del pago de impuestos.
Por eso queremos su continuidad como prestación patrimonial pública no tributaria. Es una figura jurídicamente más sólida que un impuesto, que puede generar problemas de doble imposición. También queremos ampliar su finalidad para emplear el gravamen a la banca para impulsar un gran parque público de vivienda o dirigir los recursos del energético a ampliar bonos sociales eléctrico y térmico. Y, en este último, gravar los ingresos por actividad regulada, que son la mitad de su negocio.
¿Existe margen para bajar impuestos? ¿Dónde deben concentrarse las rebajas fiscales, si es que deben hacerse?
Queremos bajar el IVA aplicado a peluquerías y servicios veterinarios, y un tipo súperreducido para pañales y productos celíacos. También un tratamiento fiscal a los artistas más justo en el IRPF.
¿Es necesario hacer ajustes en el IVA? ¿Qué consumos deberían ver subida o bajada su fiscalidad?
Además de los cambios planteados, queremos subir la fiscalidad aplicada a las primas para seguros sanitarios. No entendemos que exista una exención para estos seguros (Sumar defiende en su propuesta presupuestaria aplicar IVA a sanidad y educación privada).
España ha sido señalada en los últimos años por el escaso peso de la llamada 'fiscalidad verde'. ¿Qué medidas deberían aprobarse en este sentido, si es que deben hacerse?
Planteamos una rebaja del IVA aplicado a las tarifas de electricidad en los hogares. Queremos replantear la fiscalidad asociada a la energía para abaratar el precio que tienen consumos con origen fundamentalmente renovable y, por contra, encarecer aquellos con origen claramente fósil. En esa lógica está la subida de la imposición al gasóleo, y también el gravamen energético.
ERC: Gravámenes estructurales y permanentes
PILAR VALLUGERA (ERC)
¿Qué espera del paquete fiscal que va a tramitarse en el Congreso? ¿Cuáles son las prioridades y exigencias de su grupo para apoyarlo?
Dirigirnos hacia una fiscalidad justa, progresiva, que establezca un marco para una transición ecológica óptima y avanzar en la lucha contra el fraude fiscal que detectamos en ámbitos como el de los hidrocarburos. Tenemos una tramitación parlamentaria en la que el Gobierno español debe sentarse a negociar.
¿Deben continuar los gravámenes a banca y energéticas?
Por supuesto. Deben ser estructurales, permanentes.
¿Existe margen para bajar impuestos? ¿Dónde deben concentrarse las rebajas fiscales, si es que deben hacerse?
Siempre hablamos en términos de fiscalidad justa y progresiva. Y, por lo tanto, las rebajas fiscales siempre tienen que establecerse en la clase trabajadora, si es que el Gobierno lo plantea.
¿Es necesario hacer ajustes en el IVA? ¿Qué consumos deberían ver subida o bajada su fiscalidad?
Actualizar el IVA del tabaco y de productos similares.
España ha sido señalada en los últimos años por el escaso peso de la llamada 'fiscalidad verde'. ¿Qué medidas deberían aprobarse en este sentido, si es que deben hacerse?
Por supuesto que deben hacerse. Los efectos del cambio climático son cada vez más evidentes. En este sentido, defendemos el impuesto a las energéticas con grandes volúmenes de facturación (700 millones de euros), gravar sobre los beneficios y aplicar deducciones fiscales para proyectos de transición ecológica.
PNV: «Esperábamos una reforma, no enmiendas»
IDOIA SAGASTIZABAL (PNV)
¿Qué espera del paquete fiscal que va a tramitarse en el Congreso? ¿Cuáles son las prioridades y exigencias de su grupo para apoyarlo?
Esperábamos una reforma fiscal y no un paquete fiscal a través de enmiendas en un proyecto de ley para trasponer la directiva que establece el impuesto mínimo global. Esperamos un paquete fiscal que, atendiendo al contexto económico actual, sirva para dar respuesta a las transformaciones que está experimentando la sociedad de forma más justa y equilibrada. Una fiscalidad para lograr encontrar un equilibrio entre la necesidad de una mayor recaudación y el fomento de la inversión en aquellos sectores clave para el futuro, que van a requerir no sólo financiación pública y endeudamiento bancario, sino también de fondos propios de las empresas.
Nuestra prioridad es, por un lado, que el IMG (impuesto mínimo global) sea concertado con capacidad normativa, puesto que el futuro impositivo va a llegar desde Europa y esto significa consolidar también en Europa la autonomía fiscal que nos brinda el Concierto Económico. Por otro, atajar el fraude del IVA, que está suponiendo una importante merma en la recaudación. Y, por último, que las prestaciones patrimoniales públicas no tributarias creadas en 2022 (gravámenes a banca y energéticas) se transformen en impuestos para proceder también a su concertación a las instituciones forales.
¿Deben continuar los gravámenes a banca y energéticas?
Deberíamos abordar el debate de la fiscalidad sin dogmatismos que sólo sirven para menoscabar la credibilidad del sistema impositivo en general, y el de las empresas en particular. Abordar la fiscalidad requiere tener una visión completa de los retos y de los objetivos a conseguir desde este prisma en un contexto en el que hay que impulsar la inversión para abordar la descarbonización y la digitalización para la reindustrialización de la economía. Hay que conseguir que las empresas contribuyan de manera más justa y, a su vez, no se ponga en riesgo su competitividad, en tanto en cuanto estas compañías juegan en un ámbito globalizado y muy competitivo; además, hay que tener en cuenta que este tipo de impuestos finalmente revierten de una u otra forma en la ciudadanía.
Dicho esto, entendemos necesaria una reflexión en materia tributaria a largo plazo, una revisión integral y no parcheada de la fiscalidad, y entendemos que es más conveniente reformar el Impuesto sobre Sociedades, abordando las deficiencias que se hayan ido detectando en su aplicación y que han sido objeto de análisis, con propuestas de modificación en diversos estudios, también en el famoso Libro Blanco sobre la reforma tributaria.
¿Existe margen para bajar impuestos? ¿Dónde deben concentrarse las rebajas fiscales, si es que deben hacerse?
No somos partidarios de una bajada de impuestos si lo que queremos es mantener e incluso reforzar, entre otras, las políticas públicas en materia de salud, educación, cohesión e integración social y fomento de la actividad económica. Las rebajas fiscales, tales como deducciones, que en su caso podrían realizarse, han de atender a las necesidades del contexto económico, por lo que en estos momentos deberían ir enfocadas a incentivar determinados tipos de actividad, o a impulsar inversiones para atender a los retos estratégicos que tienen relación con la transición energética y digital.
¿Es necesario hacer ajustes en el IVA? ¿Qué consumos deberían ver subida o bajada su fiscalidad?
En los últimos años hemos solicitado la reducción del IVA aplicado a servicios de peluquería. Sin embargo, entenderemos que es necesario realizar una revisión integral: analizar qué bienes consideramos básicos y esenciales, cuáles han sido los sectores más castigados durante la pandemia y con motivo de la guerra de Ucrania y la crisis energética, y cuál es su situación en el contexto económico actual. Y, a partir de ahí, tomar las decisiones que en su caso sean necesarias con respecto a este impuesto.
España ha sido señalada en los últimos años por el escaso peso de la llamada fiscalidad ‘verde'. ¿Qué medidas deberían aprobarse en este sentido, si es que deben hacerse?
Necesitamos medidas que sirvan para incentivar al tejido empresarial y a las familias para avanzar hacia una economía y sociedad más descarbonizada y respetuosa con el medioambiente. Se podrían establecer deducciones fiscales por inversiones en el Impuesto sobre Sociedades y deducciones en el IRPF para la ciudadanía en torno a las tecnologías limpias, la energía renovable o la reducción de residuos. Asimismo, se debería impulsar el desarrollo de combustibles alternativos bajos en carbono, ajustando los tipos impositivos en vigor, diferenciándolos respecto al que se aplica a los combustibles fósiles.
BNG: «La renuncia al gravamen energético es una decepción»
NÉSTOR REGO (BNG)
¿Qué espera del paquete fiscal que va a tramitarse en el Congreso? ¿Cuáles son las prioridades y exigencias de su grupo para apoyarlo?
De partida, es ya una gran decepción por la renuncia del PSOE a mantener el impuesto a las energéticas. Nuestra prioridad es una política fiscal más justa y redistributiva y con esta premisa es muy difícil que pueda avanzarse en esa dirección.
¿Deben continuar los gravámenes a banca y energéticas?
Indudablemente, sí. Se trata de que pague más quien más tiene para poder conseguir también que pague menos quien menos tiene. Los beneficios de la banca y de las grandes empresas energéticas en los últimos años resultan realmente obscenos. Por eso no entendemos ni compartimos los pasos atrás del Gobierno, que sólo pueden explicarse como cesión, no solo a fuerzas políticas, sino especialmente a poderosos sectores económicos.
¿Existe margen para bajar impuestos? ¿Dónde deben concentrarse las rebajas fiscales, si es que deben hacerse?
La cuestión no es “bajar impuestos” en general, sino a quién se le bajan y a quién se le suben. Eso es justamente una política fiscal progresiva y progresista. Por eso proponemos bajar el IVA (que es un impuesto no progresivo, que castiga más a quien menos tiene) en productos y bienes esenciales pero subir, por ejemplo, Patrimonio o, como decíamos, a banca, energéticas y grandes fortunas. También, como está planteado en el proyecto, a las empresas transnacionales. De esa forma, se aliviaría la carga fiscal a las clases populares y sectores más vulnerables pero la administración pública, lejos de perder ingresos, podría aumentarlos.
¿Es necesario hacer ajustes en el IVA? ¿Qué consumos deberían ver subida o bajada su fiscalidad?
Es imprescindible. Se debería bajar el IVA a servicios esenciales (agua, luz, gas…), a productos culturales (excluida, mientras exista, la tauromaquia, que no es cultura y que se tendría que prohibir), productos pesqueros, productos de higiene femenina o, incluso –en este caso al 10%-- a los servicios veterinarios y peluquerías/imagen personal, para cumplir un compromiso histórico del Gobierno con este sector.
España ha sido señalada en los últimos años por el escaso peso de la llamada ‘fiscalidad verde’. ¿Qué medidas deberían aprobarse en este sentido, si es que deben hacerse?
Es importante que cualquier medida en este ámbito tenga siempre en cuenta criterios de justicia social. Lamentablemente, en muchas ocasiones se aprovecha esto como pretexto para amparar lo que en realidad es ‘greenwashing’, con medidas que benefician a grandes empresas, pero no llegan nunca a la clase trabajadora o a las mayorías sociales. Por tanto, es necesario asegurar que cualquier decisión que se tome en este ámbito va a servir para impulsar una transición energética y ecológica realmente justa.
El Partido Popular declinó contestar el cuestionario, sin alegar ningún motivo concreto.
Junts se remitió a las declaraciones de su portavoz tras el acuerdo alcanzado con Hacienda, prefiriendo no comentar asuntos aún no votados.
EH-Bildu justificó no participar en el cuestionario por tener negociaciones abiertas con el Gobierno, a la espera del resultado de las mismas.
Al cierre de la edición de esta noticia, Vox no había contestado sobre la posibilidad de responder el cuestionario.
















