Los Técnicos Superiores Sanitarios (TSS) han programado una huelga nacional durante los días 30 y 31 de octubre y 3 y 4 de noviembre debido a “ante la falta de cumplimiento” de los compromisos por parte del Ministerio de Sanidad, el Ministerio de Hacienda y las Consejerías de Salud de las Comunidades Autónomas respecto a la inclusión de sus demandas en el borrador del Estatuto Marco, acordado en junio.
“En esta ocasión el Ministerio de Sanidad ni siquiera ha recibido al comité de huelga, evidenciando una total falta de respeto hacia miles de profesionales que sostienen cada día el diagnóstico, los cribados y la seguridad del sistema sanitario público”, señalan desde el colectivo.
Estos profesionales, encargados de realizar pruebas diagnósticas y radioterápicas, entre otras tareas esenciales, destacan que sin su labor “el sistema se paraliza”. Recuerdan que situaciones como la vivida recientemente en Andalucía, donde se suspendieron pruebas y cribados y pacientes quedaron sin diagnóstico, muestran las consecuencias de no atender a este sector crucial para la salud pública. A pesar de esta realidad, advierten que tanto el Gobierno central como las autonomías siguen sin hacer caso a sus reivindicaciones.
“La huelga no es solo una medida laboral, sino una llamada de alerta a la sociedad y a las administraciones”, explican, subrayando la necesidad de reconocer y actualizar las titulaciones y condiciones laborales de quienes son fundamentales en el funcionamiento diario de los servicios sanitarios.
El 29 de octubre, víspera de la huelga, se realizarán jornadas de permanencia y ocupaciones simbólicas en los centros sanitarios a partir de las 15:00 horas para informar a los pacientes sobre los motivos de la protesta.
















