La Sociedad Española de Cuidados Paliativos (SECPAL) ha acusado la situación humanitaria en Gaza de ser «gravísima», donde la población civil experimenta una «vulneración» de sus derechos humanos. Asimismo, ha solicitado el cese de «toda acción militar» para asegurar la protección de los habitantes.
SECPAL ha criticado severamente el bloqueo que impide la entrada de alimentos, agua potable, medicamentos y combustible a la Franja de Gaza, situación que deja a más de dos millones de individuos enfrentando una grave inseguridad alimentaria, desnutrición intensa y carencia de servicios médicos elementales.
La organización también ha condenado la destrucción sistemática de instalaciones civiles y de salud, lo que restringe el acceso a tratamientos fundamentales, y ha declarado que la manipulación del hambre y la escasez de recursos básicos como táctica de guerra es una infracción al Derecho Internacional Humanitario.
Ha destacado el dolor de los segmentos más frágiles de la población, entre ellos niños, enfermos, ancianos o discapacitados. Según SECPAL, más de un millón de niños están sobreviviendo sin asistencia esencial, enfrentándose a desnutrición, enfermedades prevenibles y traumas permanentes.
CORREDORES HUMANITARIOS Y ACCESO A ATENCIÓN MÉDICA
En respuesta a estos retos, SECPAL ha exigido la creación de corredores humanitarios seguros para facilitar la entrada de suministros vitales y la evacuación de personas en condiciones críticas.
Adicionalmente, ha reclamado la restauración y protección de los servicios de salud y cuidados paliativos, asegurando un acceso igualitario a la atención médica sin discriminaciones ni barreras.
Ha instado a gobiernos y entidades internacionales a asumir responsabilidades y actuar decisivamente para terminar con la impunidad, documentando los crímenes cometidos y exigiendo cuentas a los culpables.
Para SECPAL, las acciones de Israel constituyen un genocidio, amparado en una falsa acusación de terrorismo para justificar la severidad de los actos. Por ello, ha motivado a la sociedad civil y a los profesionales de la salud a demandar a los gobiernos que intervengan y detengan esta catástrofe humanitaria.