El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) ha ratificado las sentencias de 9 y 11 años de prisión para dos hombres acusados de agredir sexualmente y filmar a una joven en un apartamento en el barrio Travesía de Vigo.
El tribunal gallego ha rechazado los recursos de apelación presentados tanto por la representación de la víctima como por los abogados de los condenados. La acusación particular había pedido que se condenara también al propietario del piso por omisión de socorro, mientras que las defensas solicitaban la absolución, sin éxito en ambos casos.
De acuerdo con la sentencia de la Audiencia Provincial de Pontevedra, ahora confirmada, ambos hombres cometieron un delito de agresión sexual. A uno de ellos, considerando un atenuante de reparación parcial del daño por haber abonado 7.500 euros, se le impuso una pena de nueve años. El otro, además de la agresión, fue hallado culpable de un delito de descubrimiento y revelación de secretos, lo que elevó su condena a 11 años y seis meses al sumar tres años y medio adicionales por este último delito.
Se reporta que este último individuo había huido de España y fue detenido recientemente en República Dominicana. Ambos deberán mantenerse alejados de la víctima, sin acercarse a menos de 200 metros ni comunicarse con ella durante 18 años, además de estar bajo libertad vigilada por cinco años y tener prohibido cualquier trabajo con menores durante 14 años. También se les ha ordenado pagar 17.000 euros en concepto de indemnización a la víctima, descontando los 7.500 euros ya consignados, y el que grabó el acto, una multa de algo más de 2.500 euros.
Por otro lado, el tercer acusado, dueño de la vivienda donde ocurrieron los hechos y señalado por omisión de socorro, fue absuelto.
Según el fallo, la víctima había conocido a los agresores el mismo día de los hechos, en septiembre de 2022, y tras una discusión, mientras ella mantenía relaciones consentidas con uno de ellos, el otro entró y ambos la agredieron. La prueba clave fue la grabación del acto y el testimonio de los agentes que acudieron al lugar.
Aunque la sentencia es apelable, el Tribunal Supremo será el próximo escalón en caso de recurso de casación.