El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, ha manifestado su descontento con la decisión de Junts de rechazar la senda de déficit en el Congreso, una medida que habría aportado 1.000 millones de euros a Cataluña. “No entiendo que algunos partidos catalanes hayan votado ‘no’ a dar la mayor capacidad de inversión al Gobierno de la Generalitat, de mil millones de euros”, dijo Illa, aludiendo al partido de Carles Puigdemont.
Durante su intervención en el evento ‘España 360’ organizado por Prensa Ibérica en Madrid, Illa comentó las consecuencias de la votación del Congreso, que rechazó los objetivos de estabilidad presupuestaria y deuda pública hasta 2028, necesarios para los futuros Presupuestos del Estado. “Siendo sinceros, de algunos partidos políticos no esperaba mucho más y no me ha sorprendido el sentido de su voto, y de otros sí”, expresó, destacando que la propuesta de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, incrementaría los recursos para las comunidades autónomas, beneficiando sectores como la sanidad y la educación públicas.
“UN DEBATE SERENO” PARA LA REFORMA DEL SISTEMA DE FINANCIACIÓN
Illa ha solicitado también una actualización del sistema de financiación, enfatizando en la necesidad de adaptarlo a las realidades actuales y en su importancia para el sostén de servicios esenciales como la sanidad y la educación. “Si creemos verdaderamente en nuestro Estado de las autonomías, no se puede bloquear la reforma del sistema de financiación ni el aumento de la senda de déficit”, argumentó.
El presidente catalán ha reafirmado su compromiso de participación activa en todos los foros pertinentes mientras ocupe su cargo. En su discurso, también abordó los desafíos habitacionales de Cataluña, reivindicando la aplicación de la Ley de vivienda estatal, la cual ha logrado reducir los precios de alquiler en la región y contrastando con los aumentos en áreas donde no se ha implementado la ley.
Finalmente, Illa criticó la atmósfera de tensión en el debate territorial, promovida por ciertos líderes, y reiteró su defensa por un enfoque fraterno y constructivo en las relaciones intercomunitarias.











