Volker Turk, Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, ha exigido a las autoridades tanzanas que indaguen sobre las múltiples muertes ocurridas en las manifestaciones tras las elecciones del 20 de octubre, las cuales fueron calificadas como fraudulentas por la Unión Africana.
“Existen indicios de que hay familias buscando desesperadamente a sus seres queridos, que van de comisaría en comisaría y de hospital en hospital. Pido a las autoridades de Tanzania que entreguen información sobre el paradero de todos aquellos que permanecen desaparecidos”, indicó en una declaración.
Volker Turk ha criticado que hay pruebas que implican a las fuerzas de seguridad en el traslado oculto de cadáveres a lugares no revelados y ha subrayado la dificultad de confirmar las cifras ofrecidas debido a la “volátil situación en materia de seguridad”.
“Pido que estos cuerpos sean entregados a los familiares para que puedan enterrarlos con dignidad”, declaró, y condenó que “existen indicios de que las fuerzas de seguridad han estado retirando cuerpos y trasladándolos para ocultar pruebas”. “Es necesario investigar todas las acusaciones de forma completa y transparente para llevar a los responsables ante la Justicia”, enfatizó.
Asimismo, demandó la liberación de “todas las figuras políticas detenidas antes de las elecciones, incluido el líder del partido Chadema, Tundu Lissu”, además de otros individuos “que han sido detenidos de forma arbitraria desde el día de los comicios”.
Se calcula que aproximadamente 150 personas han sido detenidas desde los comicios, aunque “la base legal para ello no está clara”. “Muchos de ellos, incluidos niños, han sido imputados por traición”, puntualizó.
“Es de vital importancia que todos los detenidos sean llevados ante la justicia, donde puedan discutir la legalidad de su detención. Todos deben ser sometidos a procesos justos y con garantías bajo el Derecho Internacional”, concluyó.











