Tres agentes de la policía de Pakistán perdieron la vida en un reciente ataque contra un puesto de control en la provincia de Jáiber Pastunjua, ubicada al norte y próxima a la frontera afgana. Hasta el momento, ningún grupo ha reivindicado la autoría de este suceso.
El ministro del Interior de Pakistán, Mohsin Naqvi, ha expresado su repudio hacia este acto violento, ocurrido en la localidad de Hangu, y ha rendido homenaje a los agentes fallecidos denominándolos “mártires”. “El sacrificio del personal que ha caído mártir no será en vano”, declaró Naqvi en un mensaje en su cuenta de X.
“Estos sacrificios son un testimonio del compromiso inquebrantable de Pakistán en la guerra contra el terrorismo”, destacó Naqvi, agregando que la Policía de Jáiber Pastunjua ha realizado “inmensos sacrificios en la guerra contra el terrorismo” y se encuentra “en primera línea” en esta lucha.
Por su parte, el Departamento Antiterrorista de la provincia ha calificado el ataque de “cobarde” y señaló que los enfrentamientos resultaron en la muerte de varios atacantes, aunque no se proporcionaron más detalles, según informó el diario ‘Dawn’.
La región fronteriza ha sido un foco de inseguridad durante años, especialmente por los ataques del Tehrik-i-Taliban Pakistan (TTP), en un contexto donde India y los talibanes afganos han sido acusados de apoyar a dicho grupo, acusaciones que han sido negadas por Nueva Delhi y Kabul. En respuesta, Islamabad ha realizado numerosos ataques aéreos en territorio afgano en meses recientes, alegando que son acciones contra el mencionado grupo.











