Este miércoles, el Ejército de Perú fue enviado a la isla Santa Rosa de Yavarí, situada en Loreto en el río Amazonas, con el propósito de instalar banderas nacionales y afirmar su presencia en un área que el presidente colombiano, Gustavo Petro, ha criticado a Lima por «copar».
Los militares peruanos, acompañados de representantes de diversas entidades gubernamentales, arribaron por vía fluvial al cuartel de Santa Rosa, donde procedieron a desplegar las banderas en varios puntos de la isla, fortaleciendo así la soberanía estatal en el lugar, reportó el periódico ‘La República’.
Pocas horas antes de esta acción, el ministro de Interior de Colombia, Armando Benedetti, comunicó a W Radio que su administración considera la posibilidad de llevar el caso ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), intensificando las acusaciones previamente hechas por Petro el lunes.
«Como esto ya va mal y la cosa se pone fea nosotros podríamos ir a La Haya», declaró Benedetti, añadiendo que «Perú se ha saltado varias instancias diplomáticas para resolver las cosas amigablemente, delimitan la frontera sin haber acudido a la comisión binacional que fue creada para hacer la frontera en caso de un problema».
Además, detalló que la legislación peruana recientemente aprobada se adjudica la isla Santa Rosa, lo cual complica la navegación para Colombia dado que el brazo navegable del río está ahora del lado peruano, dejando sedimentación del lado colombiano. Esto afectaría a la ciudad de Leticia, que perdería su acceso y puerto fluvial, comprometiendo la navegabilidad en ese tramo del río.
Ante estas acusaciones, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Perú ha emitido «su más firme y enérgica protesta», defendiendo la creación en junio de un nuevo distrito de Santa Rosa, amparado por las facultades que la Constitución del país confiere.