Este viernes ha dado inicio en Estambul, Turquía, una nueva serie de conversaciones sobre el programa nuclear de Irán, involucrando a la nación y a las tres principales potencias europeas, conocidas como E3 (Alemania, Francia y Reino Unido). Estas discusiones se ven marcadas por desacuerdos en torno al ‘snapback’, un mecanismo que permitiría a la troika europea reinstaurar sanciones a Teherán, según el acuerdo nuclear de 2015, el cual Irán considera nulo tras la salida de EE.UU. y la falta de compromiso demostrada por el E3.
Los tres países europeos no tienen la cualificación ni el derecho a recurrir a dicho mecanismo debido a su continuo incumplimiento de sus obligaciones y apoyo a los ataques militares estadounidenses y sionistas contra las instalaciones nucleares pacíficas de Irán
, declaró Esmail Baqaei, portavoz del Ministerio de Exteriores iraní, a la agencia oficial de noticias de Irán (IRNA) justo antes del inicio de la reunión.
El portavoz se refería así al reciente conflicto entre Israel e Irán, iniciado cuando el Ejército israelí, con apoyo estadounidense, atacó instalaciones nucleares iraníes. Durante los doce días de enfrentamientos, se registraron más de 1.000 muertos en Irán y casi una treintena en Israel.
Los E3 no condenaron a Israel por estos ataques y solo pidieron contención tras saber que los bombardeos afectaban a civiles. Esta actitud, sumada a que la guerra coincidió con negociaciones de acercamiento entre Irán y EE.UU., ha llevado a Irán a dudar profundamente de la imparcialidad europea.Estos países
, indicó el portavoz iraní, han distorsionado conscientemente su posición como participantes en el acuerdo y, por lo tanto, ya no tienen la autoridad legal para utilizar, ni siquiera ampliar, los mecanismos del acuerdo que ellos mismos están violando
. La semana pasada, Jean-Noel Barrot, ministro de Exteriores francés, amenazó con reinstaurar sanciones si Irán no demostraba un compromiso verificable con la no reactivación de su programa nuclear.
Irán, mientras tanto, ha limitado su cooperación con la OIEA, acusándola de facilitar los ataques al proporcionar información errónea, pero sigue abierto a dialogar, como lo muestra la reunión que ha comenzado hoy en el consulado iraní en Estambul, con la presencia de los viceministros de Exteriores Kazem Gharibabadi y Majid Takht-Ravanchi.