El organismo internacional, Naciones Unidas, ha expresado su rechazo este lunes ante las declaraciones de Donald Trump, presidente de Estados Unidos, sobre una posible intervención militar en Nigeria debido a la violencia contra la comunidad cristiana en ese país africano. La ONU ha instado a los estados a “abstenerse de recurrir a la fuerza”.
“Nuestra posición de principios al respecto es que los Estados miembros deben garantizar que sus acciones se ajusten al Derecho Internacional, incluida la Carta de Naciones Unidas, que insta específicamente a todos los Estados miembros a abstenerse de recurrir a la amenaza o al uso de la fuerza contra la integridad territorial de cualquier Estado”, declaró el portavoz adjunto de la Secretaría General de Naciones Unidas, Farhan Haq.
En relación a las denuncias de violencia por motivos religiosos en Nigeria, Haq comentó que “lamentablemente, los nigerianos de todas las religiones han sufrido el flagelo del terrorismo y el extremismo violento”. Además, subrayó que la ONU está dispuesta a “seguir apoyando los esfuerzos de Nigeria para abordar las causas profundas de la violencia y proteger los Derechos Humanos”.
Recientemente, el presidente de EE.UU. calificó a Nigeria como “país particularmente preocupante”, citando una “amenaza existencial” para los cristianos, lo que podría llevar a sanciones o reducción de ayuda militar. Trump intensificó su postura al amenazar con una intervención militar.
Por su parte, el presidente nigeriano, Bola Tinubu, desestimó las afirmaciones de Trump, argumentando que no reflejan la realidad religiosa del país y manifestó su disposición a colaborar con Estados Unidos para “profundizar el entendimiento y la cooperación para la protección de todas las comunidades”.
Si bien las comunidades cristianas en Nigeria han sido frecuentemente atacadas, los expertos señalan que la mayoría de las víctimas de grupos armados son musulmanes, ya que muchos de los ataques se producen en el norte del país, una región predominantemente musulmana.
















