World Vision ha expresado preocupación este miércoles, señalando que los palestinos en Cisjordania están enfrentando «una alarmante crisis de hambre y pobreza», con un 74 por ciento viviendo por debajo del umbral de subsistencia, en comparación con el 21 por ciento del año anterior.
El documento ‘The unseen crisis’ revela un deterioro en las condiciones de los niños y muestra que el número de familias que reportan que al menos un integrante no comió durante un día entero desde 2022 ha aumentado diez veces, afectando a tres de cada cuatro hogares que no pueden satisfacer sus necesidades básicas.
Además, el informe indica que el 64 por ciento de las familias han visto reducidos sus ingresos debido a la cancelación de permisos laborales, la disminución de salarios o el cierre de empresas, en un contexto de incremento de operativos y restricciones israelíes desde la ofensiva en la Franja de Gaza tras los ataques del 7 de octubre de 2023.
«En poco más de un año, una crisis económica sin precedentes ha trastocado la vida de la infancia de Cisjordania», comentó Kristen Phelps, directora nacional de la ONG en Cisjordania, quien agregó que «la velocidad y la magnitud de este colapso, que se desarrolla con poca atención por parte de las partes interesadas clave, es profundamente alarmante».
Phelps también resaltó la urgencia de que la comunidad internacional intervenga para atender las necesidades de los niños y niñas palestinos. «Este rápido deterioro no es solo una estadística; esta crisis está robando el futuro de la infancia», señaló.
«Escuchamos a familias que se saltan comidas, sacan a sus hijos de la escuela y viven con miedo constante. El mundo no puede ignorar lo que está sucediendo», declaró Phelps, tras la publicación del informe, que también señala que muchos niños y niñas palestinos de Cisjordania ahora trabajan para contribuir al sustento familiar.
AUMENTO DEL ABANDONO ESCOLAR
World Vision también destacó que las familias están exhaustas y que la asistencia escolar está disminuyendo debido a las dificultades económicas o la preocupación por la seguridad de los niños. Por lo tanto, el nueve por ciento de los niños ha dejado la escuela, mientras que el 37 por ciento de las comunidades reporta una baja en la asistencia.
La crisis también afecta la salud física y mental de los menores, con uno de cada cinco niños y niñas sin acceso a atención médica o medicamentos y una de cada cuatro familias notando cambios de comportamiento por miedo, ansiedad o trauma.
«La infancia de todo Oriente Próximo necesita desesperadamente el fin de los combates», explicó Eleanor Monbiot, responsable de World Vision en Oriente Próximo y Europa Oriental, quien lamentó que «en medio de las crisis, los niños y niñas de Cisjordania están siendo olvidados». Monbiot hizo un llamado a «tomar medidas urgentes para poner fin a las hostilidades, restablecer el crecimiento económico y apoyar a las familias para que se recuperen, proteger los derechos de la infancia y devolverles a todos los niños y niñas la esperanza».











