El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha informado que se producirán adicionales «cambios» en la Consejería de Salud después de la renuncia de Rocío Hernández por la crisis de los cribados de cáncer de mama. Moreno ha destacado esta acción en un contexto nacional donde «nadie dimite».
En una intervención ante la prensa en el Parlamento andaluz, Moreno ha explicado las medidas adoptadas por su administración frente a esta crisis sanitaria. Ha señalado que se identificó que casi el 90 por ciento de los «errores se concentraron en una específica área del Hospital Virgen de Rocío», un problema que describió como puntual en un «gran» hospital. Adicionalmente, ha delineado un plan de choque que incluye «cambiar el protocolo, invertir esos 12 millones y añadir nuevo personal, especialmente radiólogos y auxiliar de radiología, para asegurar que todas las mujeres afectadas sean examinadas antes del 30 de noviembre».
Moreno ha reiterado la importancia de la transparencia y la asunción de responsabilidades, iniciando con la dimisión de Hernández, y ha asegurado que se implementarán reformas para mejorar el flujo de información dentro de la Consejería. También ha mencionado la necesidad de remover a ciertos funcionarios que no cumplieron adecuadamente con su deber de transmitir información vital.
«Hemos actuado correctamente», afirmó Moreno, subrayando el compromiso de su gobierno con la responsabilidad y la transparencia, en contraste con la falta generalizada de dimisiones en el país. «En Andalucía somos distintos», concluyó.