QUIÉN ES QUIÉN
A MANO ALZADA
El portavoz adjunto de Sumar en el Congreso de los Diputados y dirigente de Izquierda Unida, Enrique Santiago, ha mantenido este martes un encuentro con Francesca Albanese, relatora especial de las Naciones Unidas para los territorios palestinos ocupados, en el que ambos han coincidido en exigir el fin del «genocidio en Gaza» y han reclamado a España y a la Unión Europea que rompan ya todas las relaciones diplomáticas, económicas y militares con Israel.
Antes del encuentro, en el que han participado también diputados de Podemos, BNG o Bildu, Santiago ha calificado a Albanese como «la autoridad de Naciones Unidas que más duramente está trabajando desde hace años para denunciar esta sucesión de violaciones del derecho internacional» en Palestina, y ha acusado a Israel de cometer crímenes de guerra, limpieza étnica y de desobedecer todas las resoluciones de la ONU desde su fundación. «Nuestro compromiso es absoluto con la defensa de los derechos del pueblo palestino», ha declarado.
El parlamentario de Sumar ha lamentado que la comunidad internacional «permita la supeditación total de Estados Unidos a la política de Netanyahu» y ha celebrado que el Gobierno español haya pedido a la UE sanciones a Israel y la suspensión del acuerdo de asociación, aunque ha considerado que eso «no es suficiente». «Es imprescindible la ruptura total de relaciones diplomáticas entre España e Israel», ha enfatizado.
Santiago también ha aprovechado la ocasión para rechazar los planes del Gobierno de aumentar el gasto militar hasta el 2% del PIB. A su juicio, se trata de una medida «inaceptable», no consensuada en el Congreso y que «afecta directamente al Estado del bienestar». «No vamos a pagar las bombas que caen sobre Gaza ni a financiar el rearme que enriquece a fondos de inversión estadounidenses», ha sentenciado.
ALBANESE: «ES UNA CUESTIÓN DE HUMANIDAD»
Por su parte, Albanese ha agradecido la invitación de la izquierda española y ha llamado a que la causa palestina no sea una cuestión partidista, sino «de humanidad». Ha advertido de que el pueblo palestino corre el riesgo de desaparecer y ha atribuido esta situación a «décadas de impunidad cristalizada» que a su juicio deben terminar ya.
La relatora ha llamado a cortar «todas las relaciones con Israel», incluidas las militares, económicas y diplomáticas, y ha aseverado que no existen «un Israel bueno y otro malo», sino un proyecto estatal sostenido en las «colonias» y en el «apartheid». «Lo que se permite a Israel hoy se puede permitir mañana en Europa; ya se está viendo en Alemania, Francia o Reino Unido», ha advertido.
