El Banco de España ha expresado preocupación por cómo la ausencia de Presupuestos Generales del Estado restringe la capacidad para implementar políticas fiscales eficaces con el fin de disminuir la deuda pública, según se extrae del último Informe de Estabilidad Financiera de otoño.
El informe analiza las vulnerabilidades y fortalezas de distintos sectores como las familias, las empresas, las entidades financieras y el sector público.
En particular, la institución señala múltiples desafíos para las Administraciones Públicas, incluyendo un elevado nivel de deuda, presiones incrementales en el gasto público por factores demográficos o de defensa, la falta de definición en los planes de consolidación fiscal y las vulnerabilidades de las economías externas que podrían generar un efecto contagio.
El Banco de España ha destacado que no hay medidas precisas que garanticen el cumplimiento del Plan Fiscal y Estructural de Medio Plazo y que ayuden a redireccionar la deuda pública hacia niveles más sostenibles. Además, menciona que el Plan Fiscal presentado a finales de 2024 carece de acciones específicas y adecuadas que respalden los compromisos de gasto neto previstos. “Asimismo, la ausencia de Presupuestos del Estado limita el margen de actuación de las autoridades”, indica el documento.
Pese a estos desafíos, el Banco de España ha proyectado que para 2027 se alcanzará un superávit primario, el primero en 20 años, gracias a que la vida media de la deuda, de 7,7 años, podría amortiguar impactos a corto plazo en las condiciones de financiación.











