La Cámara Baja ha rechazado la propuesta de Esquerra Republicana (ERC) que buscaba establecer un impuesto progresivo a partir de la tercera propiedad. La votación contó con el rechazo de PP, Vox y UPN, a pesar del apoyo de PSOE, Sumar y otros partidos como Bildu, Podemos, BNG, Compromís y el exministro Jose Luis Ábalos.
ERC proponía un gravamen sobre los bienes inmobiliarios residenciales que aumentaría desde el 4% hasta el 12% entre la tercera y la quinta vivienda, añadiendo un 5% adicional por cada propiedad extra a partir de la quinta. Gabriel Rufián, portavoz de ERC, defendió la medida indicando que el acceso a la vivienda es el “principal problema del país” y destacó que el esfuerzo para adquirir un piso de 60 metros cuadrados podría requerir hasta 59 años de sueldo. Además, Rufián criticó que el 45% de los inquilinos en España son considerados pobres y que el sector inmobiliario se ha convertido en un «refugio inversor».
El diputado catalán subrayó la importancia de regular los precios y aplicar impuestos como herramienta para disuadir a los inversores en bienes raíces, sentenciando que «quien quiera hacerse rico con casas, que pague».











