La reconocida cadena de tiendas Marks & Spencer (M&S) ha reportado un beneficio neto de solo 6,2 millones de libras (7 millones de euros) al finalizar el primer semestre de su año fiscal, que concluyó en septiembre, marcando un descenso del 97,8% respecto al mismo período del año anterior.
Este significativo descenso en los beneficios se debe a un impacto negativo de costes atípicos que ascendieron a 168 millones de libras (191 millones de euros), de los cuales 101,6 millones de libras (115 millones de euros) se atribuyen directamente al ciberataque que sufrió la empresa al inicio del año fiscal. Adicionalmente, se espera un impacto negativo de otros 34 millones de libras (39 millones de euros) en la segunda mitad del año.
Además, M&S señaló que durante este semestre los incrementos de costes por nuevos impuestos superaron los 50 millones de libras (57 millones de euros), aunque confían en que su estrategia de reducción de costes minimizará estos efectos adversos.
Las ventas totales de M&S alcanzaron los 7.965 millones de libras (9.054 millones de euros), un aumento del 22% en comparación con el año anterior. La deuda neta de la empresa se redujo en un 16,7%, situándose en 2.530 millones de libras (2.876 millones de euros).
Las ventas en el sector de alimentos en el Reino Unido aumentaron un 7,8%, alcanzando los 4.532 millones de libras (5.152 millones de euros). Por otro lado, las ventas en moda y hogar en el Reino Unido disminuyeron un 16,4%, situándose en 1.698 millones de libras (1.930 millones de euros), mientras que el negocio internacional decreció un 11,6%, totalizando 256 millones de libras (291 millones de euros).
“El primer semestre de este año fue un momento extraordinario para M&S. Sin embargo, la solidez de nuestro negocio y nuestra sólida base financiera nos dieron la resiliencia necesaria para afrontar el desafío y superarlo. Ahora estamos retomando el rumbo”, declaró Stuart Machin, consejero delegado de M&S.
Para el próximo semestre, la compañía anticipa que los beneficios serán al menos iguales a los del año pasado, lo que podría generar un impulso positivo para el próximo año fiscal y favorecer el crecimiento de M&S.














