QUIÉN ES QUIÉN
A MANO ALZADA
El eurodiputado socialista extremeño Ignacio Sánchez Amor ha señalado respecto a la Central Nuclear de Almaraz que la Unión Europea «no entra en la decisión de cada país de cuál es el mix energético», por lo que «el balón está en el tejado de las empresas» propietarias de esta planta a la hora de solicitar su continuidad.
Sánchez Amor se ha referido de esta forma, en declaraciones a Europa Press, al debate que tuvo lugar este pasado lunes en la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo, respecto a la petición presentada por la Plataforma ‘Sí a Almaraz’ para la continuidad de la Central Nuclear cacereña, que contó con la presencia de miembros de la plataforma y responsables políticos de la Comisión Europea y del Parlamento Europeo.
Según ha explicado Sánchez Amor, «como era previsible», la Comisión Europea señaló en esta sesión de la Comisiones de Peticiones que la Unión Europea no tiene competencias en la decisión de cada Estado miembro, ya que cada país tiene «la decisión soberana de cuál es el mix energético, de cuál es la composición, cuáles son los componentes».
En ese sentido, Sánchez Amor ha recordado que «hay países que no tienen centrales nucleares, que no han tenido nunca, hay países que tuvieron y cerraron», y otros tuvieron y pretenden mantener abiertas, total o parcialmente», mientras que en el caso de España, ha «tenido tradicionalmente energía nuclear y están en el proceso de decidir los propietarios de las centrales qué hacer con ellas».
«LA CLAVE ESTÁ EN LA VOLUNTAD DE LAS EMPRESAS»
Durante la sesión de la Comisión de Peticiones, Sánchez Amor defendió que «la Unión Europea no puede decirle a un país cuál es su mix energético», así como que «la clave del asunto, como ha estado diciendo el PSOE de Extremadura desde hace meses, está en la voluntad de las empresas».
En ese sentido, el eurodiputado socialista ha recordado que la Central Nuclear de Almaraz «pertenece a tres empresas privadas, es un negocio de tres empresas privadas», que en 2019 «acordaron con el Gobierno el cierre de la central para el año 2027».
Por tanto, ha considerado que «si pretenden ahora mantenerla abierta, pues tienen que renegociar y tienen que pedirle al Gobierno que han pensado de manera diferente y que quieren examinar la posibilidad de continuar la actividad», ha señalado Sánchez Amor, quien ha señalado que «al parecer, no se ha formalizado esa petición» de las empresas propietarias sobre petición de la continuidad de la planta.
Ante esta situación, el eurodiputado extremeño ha considerado que «el acento está en que las empresas pidan la revisión de lo que acordaron en el 2019 y que se examinen las condiciones técnicas para esa extensión de la vida útil de la central, que tendrá mucho que ver con cuestiones de seguridad», ha considerado.
Y es que, ha resaltado Sánchez Amor, la Central Nuclear de Almaraz «tiene una valoración razonablemente buena desde el punto de vista técnico y, seguramente, hay sistemas para que, con toda la seguridad, pueda seguir operando», debido a que es «un elemento importante la economía del norte de Extremadura, del norte de Cáceres y de la región en general.
Por tanto, y «a la espera de que las empresas notifiquen formalmente al Gobierno su intención de renegociar su inicial intención de cerrar», Sánchez Amor ha resaltado que se está «a la expectativa», pero «sabiendo que la Unión Europea no entra en la decisión de cada país de cuál es el mix energético, qué origen tiene la energía de ese país, si hidráulica, solar, de viento o nuclear o cualquier otra, como las centrales térmicas».
En ese caso «la Unión Europea nos reiteró que no entra y, por tanto, el balón está en el tejado de las empresas, como venimos diciendo desde hace mucho tiempo», ha concluido.
