QUIÉN ES QUIÉN
A MANO ALZADA
El ministro de Asuntos Exteriores de Polonia, Radoslaw Sikorski, ha expresado la urgencia de que la OTAN establezca una zona de exclusión aérea sobre Ucrania para prevenir la incursión de drones en el espacio aéreo de los países aliados, tras incidentes recientes en Polonia y Rumanía.
«Técnicamente, nosotros como OTAN y UE podríamos hacerlo, pero no es una decisión que pueda tomar Polonia por su cuenta, sino con sus aliados», declaró Sikorski en una entrevista concedida al ‘Frankfurter Allgemeine Zeitung’.
Sikorski ha destacado que la seguridad de la población frente a «los restos que caigan» sería «mayor» con la implementación de drones y otros dispositivos aéreos «más allá de nuestro territorio». «Si Ucrania nos pide derribarlos en su territorio, eso nos beneficia. Si me pregunta personalmente, deberíamos pensarlo», agregó.
Ucrania solicitó a la OTAN la creación de una zona de exclusión aérea en las primeras etapas de la invasión rusa en la primavera de 2022, pero los países miembros se mostraron reticentes por el riesgo de un enfrentamiento directo con Rusia.
En respuesta, Dimitri Medvedev, ex presidente y miembro del Consejo de Seguridad de Rusia, ha advertido que establecer una zona de exclusión aérea y abatir drones rusos sobre Ucrania «solo significaría una cosa: una guerra entre la OTAN y Rusia».
Sikorski también mencionó en la entrevista con el ‘FAZ’ que los ataques con drones son «una llamada de atención para acelerar nuestros preparativos defensivos». «No creo que sea una coincidencia que de repente 19 drones aparecieran en nuestro territorio por error. Nuestras Fuerzas Aéreas repelieron la amenaza durante siete horas», recordó.
Además, propuso la creación de una zona marítima de control en el Báltico para limitar los «buques fantasma» rusos, barcos antiguos con bandera de conveniencia que transportan petróleo ruso esquivando las sanciones occidentales.
La semana pasada, 19 drones ingresaron al espacio aéreo polaco, la mayoría desde Bielorrusia. Varios fueron interceptados por fuerzas polacas y holandesas en un ataque que Varsovia consideró deliberado para probar sus defensas antiaéreas. Polonia activó el Artículo 4 del Tratado de la OTAN para solicitar consultas con los miembros de la Alianza tras una amenaza a su integridad territorial.
