QUIÉN ES QUIÉN
A MANO ALZADA
Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, lanzó una advertencia este miércoles hacia Alberto Núñez Feijóo, líder del PP, señalándolo de encontrarse más solo que nunca y en el rincón de la infamia por su defensa de las acciones del Gobierno de Israel durante la intensificación de su ofensiva en la Franja de Gaza.
Niega el genocidio, se pone de perfil en el reconocimiento de Palestina como un Estado, se abstiene en las votaciones para pedir el fin de la intervención israelí en la Franja de Gaza y cuando exigí a la Comisión Europea romper el acuerdo de asociación con Israel me acusó de cometer una equivocación grave que rompía consensos europeos, ha dicho Sánchez en su réplica al líder de la oposición en el Pleno del Congreso.
Un año después, está más solo que nunca en su defensa del primer ministro israelí (Benjamin Netanyahu) y está solo en el rincón de la infamia, ha añadido el jefe del Ejecutivo.
Además, Sánchez ha criticado al presidente popular por las actitudes de figuras clave de su partido. Señaló que la nueva portavoz del partido en el Congreso, Ester Muñoz, se enorgulleció de votar por Israel en Eurovisión sin haber escuchado la canción; que Carlos Mazón, presidente de la Comunidad Valenciana, ha eliminado en sus presupuestos pactados con Vox la ayuda a la UNRWA, y que Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, ha defendido abiertamente el derecho de Israel a atacar Gaza.
Por otro lado, Sánchez ha cuestionado a Feijóo sobre su posición respecto al aumento del gasto en defensa hasta el 5% del PIB, tal como lo propone Estados Unidos, a lo que Sánchez se opone, y ha desafiado la visión de Feijóo sobre las necesidades planteadas por las Fuerzas Armadas, que según el presidente, serían suficientes con el 2,1% del PIB.
¿No cree también en la profesionalidad y en la independencia de las Fuerzas Armadas? ¿O es que ha hecho unos cálculos alternativos?, ha retado Sánchez, instando a Feijóo a presentar dichos cálculos si los tiene. Sánchez también ha acusado a Feijóo de buscar recortes y aumentos de impuestos para alcanzar los 350.000 millones de euros necesarios para la defensa para 2035 si se eleva la inversión al 5% del PIB.
