Quintero considera extremadamente difícil erradicar la cochinilla americana en tuneras canarias

Narvay Quintero, consejero de Agricultura, Ganadería y Pesca del Gobierno de Canarias, ha reconocido la gran dificultad de eliminar la plaga de cochinilla americana en las tuneras silvestres, ubicadas en zonas de difícil acceso y abandonadas. Durante una comisión parlamentaria, Quintero destacó que, aunque la lucha contra esta plaga es ardua, se han identificado ciertas variedades de tuneras que son menos susceptibles o inmunes a la afectación, centrando esfuerzos en estas.

Quintero ha comentado que la cochinilla, oficialmente considerada plaga desde 2023, fue inicialmente introducida en la Península para controlar la expansión desmesurada de la planta, y en Canarias, afecta especialmente a las variedades más comunes de tunera: el higo blanco y rojo, siendo el ‘indio’ más resistente. «La cochinilla seca la planta y la mata y se introduce desgraciadamente, como ha pasado con muchas enfermedades y algunos por desconocimiento o, no voy a decir otra palabra, la han introducido en Canarias, la han traído para acá», explicó.

Ha indicado también que existen tratamientos costosos que están teniendo éxito a nivel profesional, con medidas como los sellados en invernaderos. Sin embargo, la plaga ha devastado casi completamente las plantaciones en Gran Canaria, Lanzarote y La Palma, aunque está más controlada en otras islas.

Luis Campos, portavoz de NC-bc, lamentó el impacto devastador del verano en Gran Canaria, donde la tunera se está perdiendo, destacando su importancia histórica durante crisis y hambrunas, cuando este fruto ayudó a muchas familias y su penca servía de alimento para el ganado. «Estamos asistiendo a la desaparición de nuestra tunera tradicional por la introducción de esta cochinilla mexicana, que nada tiene que ver con la cochinilla histórica que hemos trabajado, cultivado incluso en Canarias, y que generó muchísima riqueza pues de ahí se extraían los colorantes, el carmín incluso, que se exportó en toda Europa», comentó Campos, haciendo un llamado a no claudicar en la lucha contra esta plaga «absolutamente demoledora».