Al anunciado rechazo de Junts a los tres primeros decretos-ley del Gobierno se le ha sumado en los últimos días otra voz discordante dentro del bloque de la investidura. Podemos ha dejado en el aire su apoyo al que prorroga la respuesta económica a la crisis de precios, poniendo una serie de condiciones, y se muestra decidido a tumbar el que reforma el subsidio de desempleo.
En el primero, los ‘morados’ exigen una serie de condiciones para su apoyo en materia de vivienda o alimentación. Por ejemplo, un límite del 2% para las subidas de precio en los contratos de alquiler (y no al 3% como marca la Ley de Vivienda), pero también congelar las rentas de los nuevos contratos, o limitar al 2% el margen de beneficios de las grandes superficies en productos alimentarios.
En este caso, Podemos busca ampliar las medidas contenidas en un decreto que, entre otras cuestiones, incluye la prórroga de medidas propiciadas por la propia formación, como la prohibición de los desahucios y lanzamientos sin alternativa habitacional en situaciones de vulnerabilidad o la prohibición de cortes de suministros.
Los de Ione Belarra han dejado en el aire su apoyo en caso de no ver aceptadas sus peticiones, pero su postura no ha sido tan rotunda como en la reforma del subsidio de desempleo. Ahí el mensaje es claro: no lo apoyarán por entender que incluye “recortes” en la cotización de los perceptores del subsidio.
El decreto-ley es el primero aprobado por el Ministerio de Trabajo que dirige Yolanda Díaz desde la ruptura entre Podemos y Sumar.
¿Cuál es la crítica de Podemos al decreto-ley?
La reforma rebaja la cotización del subsidio para mayores de 52 años, que pasa del 125% de la base mínima de cotización al 100%. La rebaja en la cotización se traduce en una menor pensión, por lo que Podemos justifica su rechazo y se resiste a dar su apoyo.
Esta rebaja era una de las propuestas del Ministerio de Economía durante la negociación mantenida con Trabajo para alumbrar la reforma. Sin embargo, desde este Ministerio explicaban, antes incluso de que estallara la polémica, que la rebaja era entendible y que no era tan necesaria por la subida de la base mínima de cotización en los últimos años, empujada por la subida del SMI.
La protección adicional de esta ‘sobrecotización’ se deriva de una situación en la que el salario mínimo no alcanzaba siquiera 700 euros. Antes de la subida prevista para este viernes, el SMI se sitúa en 1.080 euros al mes en 14 pagas.
¿Qué regula el decreto-ley?
El decreto-ley reforma el subsidio de desempleo para simplificar los supuestos de acceso al mismo, mejorar su cuantía inicial hasta los 570 euros y establecer una senda decreciente con un mínimo de 480 euros, cuantía vigente hasta ahora.
Entre sus mejoras está el acceso para los trabajadores eventuales agrarios o las personas de menos de 45 años sin responsabilidades familiares cuando hayan agotado prestación contributiva.
También se suprime el plazo de espera de un mes desde que se agota la prestación contributiva para recibir el subsidio y se prevé la declaración responsable con comprobación posterior sobre los requisitos de renta y responsabilidad familiar para la prórroga o reanudación del subsidio.
El decreto-ley también incluye una modificación del permiso de lactancia para convertir su disfrute en un derecho para todos los trabajadores, independientemente de su convenio de sector o de empresa.