Este jueves, el Congreso de los Diputados debate y vota la convalidación del Real Decreto-ley 2/2023, de 16 de marzo, de medidas urgentes para la ampliación de derechos de los pensionistas, la reducción de la brecha de género y el establecimiento de un nuevo marco de sostenibilidad del sistema público de pensiones. El articulado esbozado por el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, recibirá el visto bueno del hemiciclo tras cerrar acuerdos con Unidas Podemos, EH Bildu y, el último en anunciar su voto afirmativo, Esquerra Republicana de Catalunya.
El Grupo Republicano ha logrado incluir tres puntos que ya están en el texto y otros dos que el Gobierno se ha comprometido a incluir como enmiendas una vez abierta la tramitación como Proyecto de ley. No obstante, por falta de confianza y habida cuenta de los precedentes, el Grupo Republicano ha pactado un salvoconducto que garantiza que sus dos propuestas pendientes se integran en el texto.
ERC ha informado de que La Moncloa asumió como propias tres medidas de su grupo que no formaban parte de los textos anteriores trabajados por el ministerio y los agentes sociales. Así, han reclamado la autoría de la inclusión de la cuota de solidaridad, el incremento del 10% en el complemento de brecha de género y la ampliación del alcance de la cobertura de lagunas hasta los 84 meses para facilitar el acceso a determinadas mujeres a las prestaciones contributivas. Todo esto ya está en el RDL de Escrivá.
Ahora bien, el Grupo Republicano ha acordado también el incremento de la pensión de jubilación y la prestación de Incapacidad Permanente de las mujeres trabajadoras que realizan una reducción de jornada por guarda legal y el aumento de la pensión de Incapacidad Temporal por riesgo durante el embarazo o la lactancia para aquellas trabajadoras que estén en reducción de jornada.
Han firmado un documento para que, en el caso de que el Proyecto de ley no llegue a la ponencia, La Moncloa incorpore las dos iniciativas como disposición adicional en la próxima ley
Ambas han sido aceptadas por el Ejecutivo. El Grupo Socialista se ha abierto a tramitar el Real Decreto-ley como Proyecto de ley para, vía enmienda, incorporarlas. No obstante, no sería la primera vez que el PSOE acepta tramitar un RDL como Proyecto de ley y lo mantiene bloqueado ampliando sistemáticamente el plazo de enmiendas, como ha ocurrido recientemente con el sexto paquete anticrisis.
Según ha confirmado el diputado de ERC Jordi Salvador i Duch a Demócrata, conscientes de este tipo de precedentes, han firmado un documento para que, en el caso de que el Proyecto de ley no llegue a la ponencia, La Moncloa incorpore las dos iniciativas como disposición adicional en la próxima ley.
Paquete de nuevas mejoras para las mujeres
Las dos iniciativas impulsadas por Esquerra están relacionadas con el incremento de las prestaciones de las mujeres que se ven en la necesidad de reducir su jornada laboral para atender un hijo a cargo. Las trabajadoras que reducen su jornada laboral por este motivo acceden a una prestación —ya sea por incapacidad temporal, jubilación, incapacidad permanente…— que se calcula con el salario propio de la jornada reducida. En consecuencia, “hacerse cargo del hijo no solo les repercute en un menor salario, sino también en el acceso a las pensiones”, lamentan desde el Grupo Republicano.
“Para compensar estas situaciones injustas que sufren las mujeres trabajadoras”, razona ERC, se ha acordado el incremento de la pensión de jubilación y la prestación de Incapacidad Permanente de las mujeres trabajadoras que realizan una reducción de jornada por guarda legal. De manera que, a efectos del cálculo de jubilación e IP, los periodos cotizados durante la reducción de jornada se computarán al 100% de su jornada anterior, exactamente igual que si no la hubieran reducido. Este incremento será de aplicación durante todo el período de reducción de jornada, no únicamente durante los primeros 2 o 3 años, como estipula la legislación actual (Artículo 237.3 de la Ley General de la Seguridad Social).
Asimismo, se aumentaría también en casos de riesgo durante el embarazo o la lactancia. Actualmente, cuando una mujer trabajadora está en reducción de jornada por cuidado de un hijo menor y queda nuevamente embarazada, en caso de no poder desarrollar su trabajo por riesgo en el embarazo tiene una pensión inferior a la que le correspondería porque esta se calcula atendiendo a su jornada reducida.
Los tres hitos
En una rueda de prensa celebrada en el Congreso, el diputado de Esquerra Jordi Salvador i Duch se ha congratulado de las tres medidas que Escrivá aceptó y ya figuran en el RDL.
La primera es la inclusión de la cuota de solidaridad. A día de hoy los salarios cotizan hasta los 4.500 euros mensuales (base máxima). A partir de ese importe, no se aporta nada a la Seguridad Social. Eso beneficia a los salarios astronómicos y sobre todo a las empresas que pueden pagar nóminas de 6 cifras. A modo ilustrativo, como consecuencia de ello, mientras un sueldo de 1.500 euros mensuales puede cotizar alrededor de un 30% (casi 500€), un sueldo de 15.000 euros mensuales no aportará más del 8,5% (menos de 1.300).
En este sentido, se ha introducido una cuota a pagar para la parte de salario que supera la base máxima (4.500 euros). Con este no instrumento, las empresas que abonen salarios por encima de 60, 70 u 80.000 euros realizarán una pequeña aportación adicional a la Seguridad Social para financiar políticas de redistribución de la riqueza.
“Ésta es la vía progresiva para financiar el sistema: que paguen más las empresas que pueden permitirse salarios de seis cifras y los trabajadores que se encuentran en el 3% con más ingresos para que se pueda beneficiar la mayoría”, esgrimió Salvador.
En segundo lugar, el incremento del 10% en el complemento de brecha de género previsto en el artículo 60 de la Ley General de Seguridad Social. “Debido al carácter machista y patriarcal de la sociedad y del mercado de trabajo, las mujeres que tienen uno o más hijos sufren un perjuicio en sus carreras laborales y, en consecuencia, en sus carreras de cotización”, lamentan, en consecuencia, “gracias a este acuerdo, a partir del ejercicio siguiente (2024) este complemento se incrementará un 10% adicional a la revalorización que corresponda”.
Por último, ERC ha valorado la ampliación del alcance de la cobertura de lagunas hasta los 84 meses para facilitar el acceso de determinadas mujeres trabajadoras a las prestaciones contributivas. Consideran que las carreras profesionales de las mujeres son estadísticamente más “cortas y más desiguales”. Para equilibrar la balanza y atajar esta situación, se ha diseñado un mecanismo de cobertura para cuando a las trabajadoras les faltan unos pocos años para poder acceder a determinadas prestaciones. Consiste en que los periodos no cotizados cuentan como si hubieran cotizado a base mínima. Hasta la aprobación de este Real Decreto-ley, esto tenía un tope de 48 mensualidades; y otra él, se llega a los 84 meses.