QUIÉN ES QUIÉN
A MANO ALZADA
En la Asamblea de Madrid, los principales partidos de la oposición han destacado esta semana la insuficiencia de recursos y la inestabilidad laboral que afecta a los Bomberos y Brigadas Forestales de la Comunidad de Madrid, situación que ha provocado una huelga en ambos cuerpos. Han exigido, asimismo, un reconocimiento de sus demandas laborales. Por su parte, Carlos Novillo, consejero de Medio Ambiente, Agricultura e Interior, ha defendido la labor de su departamento y ha comprometido mejoras para el próximo año.
En su intervención ante la Asamblea para revisar el plan de Protección Civil contra incendios forestales (Infoma), Novillo se ha centrado en la situación del personal forestal, tanto de las Brigadas Forestales contratadas por la empresa pública Tragsa como del personal de la Agencia de Seguridad y Emergencias 112 (ASEM112), que también se encuentra en huelga por el reconocimiento de sus condiciones laborales.
Alejandro Sánchez Pérez, diputado de Más Madrid, ha criticado la gestión de la plantilla durante la temporada alta de incendios, señalando que el personal de Tragsa se encontraba en huelga, la cual fue pausada temporalmente debido a la emergencia por incendios. Sánchez ha calificado de fracaso el proceso de estabilización de la plantilla en 2021, año en el que se delegó la contratación a Tragsa, lo que resultó en la pérdida del 40 por ciento de los puestos de trabajo.
El diputado socialista José Luis García Sánchez ha alabado el trabajo de los brigadistas y bomberos, instando al consejero a garantizar la continuidad de los contratos, reconocer la categoría de bombero forestal a las Brigadas y pagar los pluses de peligrosidad, toxicidad y penosidad que merecen. García ha subrayado que el personal ‘se juega la vida’ por apenas 1.300 euros y contratos de roles menores.
Íñigo Hernández de Luna, diputado de Vox, ha recordado que hace tres años el Gobierno regional prometió una plantilla de 2.200 bomberos, cifra que hoy día solo alcanza los 1.700 agentes, y ha criticado la reducción de plazas de personal fijo-discontinuo, que actualmente se sitúa por debajo de los 70 puestos. Hernández ha exigido reconocimiento laboral para los trabajadores de Tragsa.
En respuesta a estas críticas, Novillo ha defendido que, tras la aprobación de la Ley 05/2024 el pasado diciembre, el personal laboral y de brigadas será oficialmente reconocido como bomberos forestales, facilitando el acceso a la jubilación anticipada, entre otros beneficios. Además, ha asegurado que el próximo contrato con Tragsa incluirá un incremento de más de cuatro millones de euros para mejorar las retribuciones, y ha rechazado las críticas del partido socialista sobre esta gestión, destacando que el Gobierno central también recurre a Tragsa para contrataciones similares.
Novillo ha reprochado a la izquierda ‘echar balones fuera’ cuando, según él, las condiciones de los brigadistas en el Gobierno central ‘no están mejor’ que en la Comunidad de Madrid. El ejecutivo regional, afirmó, se ocupa y preocupa por el colectivo ‘con rigor y sin improvisaciones’, garantizando una gestión responsable de los recursos.
